REDES DE ACTORES
Prof. María Gabriela Camargo Mora
Instituto de Geografía y Conservación de Recursos Naturales. Universidad de Los Andes. Mérida-Venezuela.
Introducción.
El capital social se encuentra mas ligado a recursos socio-estructurales, en los que destacan relaciones de autoridad, las relaciones de confianza y la asignación consensual de derechos que establecen las normas. El punto de vista de la teoría de redes es aún más enfático con respecto a cómo la sociedad se fundamenta y recrea. Sus adeptos consideran que la estructura social se descubre al examinar las relaciones existentes entre unidades Inter.-actuantes, que normalmente son denominados “actores” e incluye a individuos, instituciones, empresas y hasta naciones. Son las relaciones en sí mismas, los actores involucrados en ellas y como se vinculan entre sí y quizás, aunque no necesariamente sus contenidos, los que determinan que una sociedad y las posibles restricciones y guías a la conducta humana (Coleman,1994).
Los lazos relacionales entre los actores constituyen la preocupación primaria para la teoría de redes, siendo los atributos de los actores de importancia secundaria (Wasserman y Faust, 1994 en Díaz y Figueras, 2003).
Concepto, objetivo y alcances
La red está referida a relaciones específicas entre una serie definida de elementos (personas, grupos, organizaciones, ciudades, países e inclusos acontecimientos) (Molina, 2001). El término es aplicable a dos fenómenos: por una parte, a un grupo de relaciones espontáneas que pueden ser descritas en un momento dado y que aparecen en un contexto definido por la presencia de ciertas prácticas, más o menos formalizadas. Por otra parte, él termino red también puede aplicarse al intento de organizar esas interacciones de un modo más formal, trazándoles una frontera o un límite, poniéndoles un nombre y generando así un nuevo nivel de complejidad, una nueva dimensión (OIT, 1998). [1]
Börzel (1998) identifica dos escuelas en el campo del concepto de red de política (policy network): “escuela de intermediación de intereses” que emplea el concepto de red como noción genérica en la que se incluirían todas las diferentes formas de relaciones entre los grupos de interés y el Estado. La otra “escuela de gobernanza” concibe las redes como una forma específica de gobernanza, como mecanismos para movilizar los recursos políticos en situaciones que dichos recursos están repartidos entre actores públicos y privados. La primera, por tanto, acuña un concepto más genérico de red, abarcando más tipos de situaciones, pues lo aplicaría a todo tipo de relaciones entre actores públicos y privados. La segunda, por su parte, utiliza un concepto de red mas restringido que solo engloba una forma específica de interacción entre actores públicos y privados: aquella basada en una coordinación no jerárquica.
En la literatura sobre gobernabilidad, la mayoría de los autores lo emplean como concepto analítico para estudiar las relaciones estructurales, las dependencias mutuas y las dinámicas entre actores en la política (politics) y en la conformación de políticas públicas (policie). Aquí, el estudio a través de redes da una perspectiva desde la que analiza situaciones que no pueden explicarse como acciones pilotadas unilateralmente desde el centro tradicional del poder político y dirigido a la persecución de fines comunes. En este tipo de análisis, se determina qué intercambio de recursos se realiza entre los distintos actores y se analizan los resultados de dicha interacción, ello permite alcanzar explicaciones sobre el comportamiento de los actores. Otros autores (Renate Mayntz, Fritz Scharp[2]) entienden que no es suficiente comprender el comportamiento de un actor concreto y parten de la presunción implícita de que las estructuras sociales tienen más poder explicativo que los actores y sus recursos individuales.
En esta visión, las redes se conciben como conjunto de relaciones relativamente estables y en continuo funcionamiento, que movilizan recursos dispersos, todo ello con el fin de articular una acción colectiva que permita dar soluciones a problemas. Para explicar el concepto de redes y los resultados que producen se construye el concepto de actor-centred institutionalism que combina principios de rational choice con otros de institucionalismo. Esta visión expresa un cambio en las relaciones entre Estado y sociedad, pudiendo afirmarse que ya no existe una separación estricta entre los dos. En este contexto, las redes se presentan como solución para la coordinación de los problemas propios de las sociedades modernas. La construcción teórica es sofisticada y representa una porción menor en la literatura sobre redes (Navarro, 2002).
El objetivo de una red es el de mantener el flujo de información, y dada la heterogeneidad de los intereses y objetivos de los participantes, articularse con el fin de desencadenar hechos políticos y sociales de trascendencia local, regional, nacional o internacional. Es un medio para la participación comunitaria, que permite la identificación y definición de las necesidades de la población, los factores culturales y tecnológicos (invención, asimilación y adaptación) de las diferentes localidades y regiones. Son fuerzas sociales que emergen de las bases de la sociedad, cuyas relaciones específicas conforman vínculos con características, recursos, potencialidades y problemas propios (Yépez Tamayo, 1987; Camargo, 1999; Red Ara, 2000; FORJA, 2001; Banco Mundial, 2001; Molina 2001).
Una red se construye con la acción de cada organización en su contexto propio. Esta acción redundará en el conjunto, produciendo una transformación socio espacial. Se considera que la toma de conciencia acerca de la capacidad de organización influye en la apropiación de los procesos por parte de los individuos y la participación a su vez va construyendo conciencia (OIT, 1998).
La red social implica un proceso de construcción permanente, tanto individual como colectivo; es un sistema abierto que, mediante un intercambio dinámico entre sus integrantes y con integrantes de otros grupos sociales, permite convertir en actuales y colectivos los recursos potenciales que poseen los individuos y generar cambios en la estructuración socio-espacial en un territorio específico (op cit, 1998). Por tanto, los comienzos de una red no fructifican de un día para otro; se trata de movimientos más o menos organizados, de conversaciones y prácticas sociales, de momentos de encuentros y desencuentros. Son grupos humanos que crearán un campo de interés común.
Características de las redes de actores
Una característica importante de las redes es su permeabilidad. Las redes basadas en puntos de coincidencia heredados son menos permeables que las que se basan en rasgos comunes adquiridos. En algunos casos, las redes impermeables han sido señaladas y criticadas como impedimentos para el progreso económico (Olson, 1982). En otros casos, se ha observado y afirmado que el deterioro de las redes permeables es la causa de la decadencia de las tradiciones cívicas (Putnam, 1995).
La mayoría de las redes conectadas por capital social se mantienen a través del contacto personal y el aprendizaje experimental. A veces, las redes impersonales de capital social pueden mantenerse debido a la presencia de valores afectivos compartidos. Por ejemplo, algunas personas que pertenecen a organizaciones internacionales como iglesias, clubes de servicio, organizaciones políticas y asociaciones comerciales, se sienten conectadas entre sí aun que no se conozcan personalmente. Sus puntos de coincidencia y valores afectivos compartidos les proporcionan un capital social latente, que sólo requiere el contacto personal para activarse. La existencia de ese capital social latente es posible porque todos ellos saben que comparten valores afectivos respecto de determinados credos, conceptos y objetos.
Las redes resuelven el conflicto que existe entre quienes consideran que el capital social es un concepto micro, y quienes opinan que es un concepto macro. En un sentido, el capital social es un concepto micro porque es aportado por personas. Por otra parte, es un concepto macro porque reside en redes que pueden superponerse, y sirve para conectar a diferentes segmentos de la sociedad. También es un concepto macro en el sentido de que la afinidad es algo que se aprende culturalmente (se hereda), y no constituye el resultado de ningún esfuerzo individual consciente. Por último, una red puede ejercer influencias tanto micro como macro, pudiendo desalentar el comportamiento oportunista de uno de sus miembros, porque el costo de no hacerlo le acarrearía la repulsa de todos los demás miembros de la red. Es por ello que las redes pueden desempeñar una importante función en el mantenimiento de las reglas y normas aceptadas.
Estructura de las redes de actores
Las redes pueden tener muy diversas estructuras, entre ellas la jerárquica, la lineal y la difusa. Una organización puede tener una estructura formal de redes, pero el capital social puede conducir a la creación de redes de facto conectadas por ese capital social. A medida que aumentan las conexiones de capital social dentro de una red, el acceso de una persona a los recursos y la información también se incrementa. Sin embargo, cuando las conexiones que tiene una persona dentro de una red de capital social aumentan, también se eleva el costo de mantenimiento de esos contactos, especialmente si se mide en función del tiempo que se le dedica. Afortunadamente, la existencia de sistemas de comunicación rápidos y de bajo costo, como el correo electrónico y los teléfonos celulares, ha reducido considerablemente el costo financiero de mantenerse en contacto.
Cada estructura de red tiene consecuencias para la eficiencia económica y la generación de capital social (Burt, 1992). A continuación se mencionan algunas de las consecuencias de las redes en el paradigma del capital social:
Es más probable que quienes participan en redes ricas en capital social actúen sobre la base de los intereses compartidos entre los miembros de la red, que en beneficio de personas extrañas a ésta.
A medida que aumenta el capital social dentro de una red, también crece la productividad y se reducen las diferencias de ingresos entre sus miembros, aunque pueden ampliarse las diferencias en términos de productividad e ingresos entre los miembros de la red y quienes no son miembros de ella. Por esta razón, una de las causas de la pobreza puede estar relacionada con la exclusión de los pobres de las redes productivas.
Las redes pueden diferenciarse por su grado de permeabilidad. Las que se basan en puntos de coincidencia heredados son menos permeables que las derivadas de puntos de coincidencia adquiridos.
Cuando para ser miembro de una red se requiere características o puntos de coincidencia heredados, ello puede constituir un obstáculo para el desarrollo y la reducción de la pobreza.
Cuando para ser miembro de una red se requieren características adquiridas, ello facilita el desarrollo, ya que las redes pueden adaptarse a los cambios demográficos y las nuevas oportunidades.
Las asimetrías en las relaciones que forman parte de las redes crean obstáculos para el flujo de los recursos. Por ejemplo, si existe capital social entre las personas A y B, y entre A y C, pero existen relaciones hostiles entre B y C, la red será inestable y el flujo de recursos se verá restringido.
Funciones de las redes de actores
Méndez (1998) señala que las redes suelen aparecer por necesidades comunes, como superar la atomización, fortalecimiento, capacitación, asesoramiento, comunicación, coordinación y necesidad de trabajar en conjunto para aumentar el impacto. Generalmente no hay tiempo para realizar en forma individual los controles, las relaciones con el Estado, la capacitación de los recursos humanos, las evaluaciones y las mejoras legislativas; por ello, vale la pena reunirse con similares Las redes están siendo consideradas como una de las expresiones más recientes de las nuevas experiencias de desarrollo de articulación y coordinación. Identifica como las funciones tradicionales de las redes están vinculadas con:
Articulación y Coordinación: Se pueden concretar estas acciones mediante la gestión de actividades conjuntas entre las organizaciones como investigación, transferencia de recursos humanos, sistema de informática, servicios de administración, contabilidad, inversiones, relaciones públicas, prensa y comunicación, entre otros. Es posible realizar una oferta conjunta de servicios sociales, disminuir gastos en forma conjunta y hasta unir recursos financieros e invertirlos. Estas organizaciones son facilitadoras del intercambio Inter.-institucional e Inter.-regional, con mayor alcance, porque las acciones conjuntas trascienden los proyectos puntuales y logran mayores coberturas.
Fortalecimiento Institucional: La mejora institucional de las organizaciones integrantes tendrá más sentido sí se conocen sus debilidades y fortalezas, porque de esa forma se apuntará a reforzar concretamente allí donde hace falta. Mejorar la calidad de los servicios que prestan, fomentar el conocimiento sobre el sector, la temática o las organizaciones, profesionalizar a las organizaciones y sus servicios, trabajar por su fortalecimiento financiero, aumentar sus capacidades de negociación y concertación. Se trata de ofrecer asistencia cuando lo requieren las organizaciones integrantes, a los fines de obtener mejor rendimiento. Estas organizaciones deben preocuparse por implementar modelos de sistematización y medición del impacto de las acciones de las organizaciones integrantes.
Representatividad: También conocida como la actividad de lobby o cabildeo para todas aquellas gestiones en materia legal o fiscal, participación en redes externas y eventos nacionales e internacionales, presencia conjunta ante el gobierno, empresas privadas, medios de comunicación y Sociedad Civil; con el objetivo final de incidir en políticas o modificaciones, en beneficio de sus organizaciones integrantes. Se trata de organizarse, unificarse, contar con voces únicas, mejorar la comunicación con terceros e incrementar la capacidad de exigencia como interlocutor válido jurídicamente hablando. Se pueden concretar acciones participando en el diseño y evaluación de la política social, sugerir modificaciones para un marco legal más beneficioso, lograr puestos de representación en organizaciones públicas y mantener canales de comunicación y colaboración con el gobierno. En todo caso se trata de promover la defensa de los derechos de las organizaciones. Parra ello, es preciso situarse con una posición pro-positiva ante los planes del Gobierno y ante la Política Social en vigencia.
Movilización de Recursos y Beneficios: Entendida como una serie de modalidades que van desde la preparación y presentación de proyectos conjuntos a ser ejecutados por varias organizaciones, establecimiento de prioridades de proyectos financiables, negociación y compromisos con financistas, hasta la compra-venta o gestoría de descuentos de bienes y servicios que reduzcan costos operativos de las organizaciones miembros. Organizando bancos nacionales de información sobre agencias de cooperación, redes temáticas y regionales se facilitarían los trabajos conjuntos entre organizaciones.
Promoción y Comunicación: Resume todas aquellas actividades que faciliten la presencia pública, generen opiniones públicas favorables a los miembros y organización de eventos que reporten experiencias al país y al sector social. Promover la comunicación, impulsar vínculos de interacción y cooperación nacional e internacional, difundir experiencias y producir reflexión y pensamiento. Trasmitir la información necesaria para apoyar el trabajo de los miembros, presentar documentos públicos y generar opinión publica sobre aspectos en particular. Constituirse en foros de reflexión en temas comunes y velar por la mayor presencia, visibilidad y legitimidad del espacio de las organizaciones. Dar a conocer el trabajo de las organizaciones e intercambiar información cualitativa y cuantitativa del sector. Asumir y divulgar opinión y puntos de vistas sobre acontecimientos públicos.
Multiplicación de la Presencia y/o Participación en diferentes instancias: Las organizaciones cúpula y sus integrantes pueden estar representadas por cualquiera de sus miembros en cualquier instancia en que participen. Esto permite ampliar el espacio de participación entre diferentes frentes. Además los mecanismos de comunicación de las organizaciones cúpula permiten compartir la información rápidamente. Actualmente aparecen funciones con nuevas dimensiones de interés público desde las organizaciones cúpulas sociales, interesantes para el futuro próximo que serán identificadas.
Autorregulación, Control Normativo o Auditoría Social: Esta función se realiza sobre las organizaciones miembros para el seguimiento y evaluación de las organizaciones afiliadas o aquellas que desean pertenecer a la organización cúpula, lo cual asegura su legitimidad para ser interlocutor válido por las representadas, mediante el monitoreo permanente de sus programas y proyectos y de su administración. Control normativo es dar fe de la actuación de sus miembros, donde establecer normas y vigilar su cumplimiento, es una condición necesaria. Se pueden garantizar las funciones de representación, canalización de recursos y promoción, asegurando calidad de las organizaciones ante los contribuyentes, el Estado, los beneficiarios y ante la opinión pública. En estas instancias es más fácil compartir o crear principios éticos comunes, la definición de valores compartidos vinculados con los beneficiarios, la administración, presentación de cuentas, la relación con el Estado, con los financistas y con otras organizaciones del mismo sector es una tarea de autorregulación. Las organizaciones cúpula pueden proponer códigos de ética que se conviertan en referencias para el sector, pueden ejercer control social sobre las acciones de las organizaciones y transparencia de las cuentas. Tratándose de que las organizaciones no están obligadas a realizar auditoria de sus acciones, el exponerse a la regulación de su organización cúpula, se convertiría este accionar en un excelente factor auto-legitimante, y por otro lado, la organización cúpula se convierte en un instrumento de autorregulación del sector.
Veeduría Pública: Las organizaciones pueden proponer y vigilar la ejecución de una política de distribución de la riqueza. Pueden participar en un plan de seguimiento y monitoreo de la ejecución presupuestaria de los programas sociales del Estado. Pueden generar propuestas de reforma del sistema político y económico. Pueden generar información que precise las causas de la pobreza, pueden elaborar propuestas y metodologías innovadoras producto de la experiencia colectiva. Pueden apoyar la creación de servicios para los sectores excluidos. Se trata de "ver" por el colectivo una realidad de interés público, experiencia similar a la realizada en el ámbito sectorial por las organizaciones de promoción y defensa de los Derechos Humanos. Se trata de una nueva función que nos toca cumplir con valentía y exposición pública.
[1] Méndez (2002) señala que las redes son alianzas o lugares de encuentro de organizaciones. Formas institucionales y colectivas de organización. Puede denominarse de diferentes formas tales como asociaciones de organizaciones, cúpulas, coordinadoras, federaciones, centros nacionales, mesas coordinadoras, agencias de coordinación, organizaciones sombrilla, consorcios de ONG`s, encuentros o foros, unión, coalición, frente consejo, entre otras.
[2] En generales lo que se conoce como Escuela Max-Plank, representada fundamentalmente por los autores referidos y su desarrollo del concepto actor-centred institutionalism.
Instituto de Geografía y Conservación de Recursos Naturales. Universidad de Los Andes. Mérida-Venezuela.
Introducción.
El capital social se encuentra mas ligado a recursos socio-estructurales, en los que destacan relaciones de autoridad, las relaciones de confianza y la asignación consensual de derechos que establecen las normas. El punto de vista de la teoría de redes es aún más enfático con respecto a cómo la sociedad se fundamenta y recrea. Sus adeptos consideran que la estructura social se descubre al examinar las relaciones existentes entre unidades Inter.-actuantes, que normalmente son denominados “actores” e incluye a individuos, instituciones, empresas y hasta naciones. Son las relaciones en sí mismas, los actores involucrados en ellas y como se vinculan entre sí y quizás, aunque no necesariamente sus contenidos, los que determinan que una sociedad y las posibles restricciones y guías a la conducta humana (Coleman,1994).
Los lazos relacionales entre los actores constituyen la preocupación primaria para la teoría de redes, siendo los atributos de los actores de importancia secundaria (Wasserman y Faust, 1994 en Díaz y Figueras, 2003).
Concepto, objetivo y alcances
La red está referida a relaciones específicas entre una serie definida de elementos (personas, grupos, organizaciones, ciudades, países e inclusos acontecimientos) (Molina, 2001). El término es aplicable a dos fenómenos: por una parte, a un grupo de relaciones espontáneas que pueden ser descritas en un momento dado y que aparecen en un contexto definido por la presencia de ciertas prácticas, más o menos formalizadas. Por otra parte, él termino red también puede aplicarse al intento de organizar esas interacciones de un modo más formal, trazándoles una frontera o un límite, poniéndoles un nombre y generando así un nuevo nivel de complejidad, una nueva dimensión (OIT, 1998). [1]
Börzel (1998) identifica dos escuelas en el campo del concepto de red de política (policy network): “escuela de intermediación de intereses” que emplea el concepto de red como noción genérica en la que se incluirían todas las diferentes formas de relaciones entre los grupos de interés y el Estado. La otra “escuela de gobernanza” concibe las redes como una forma específica de gobernanza, como mecanismos para movilizar los recursos políticos en situaciones que dichos recursos están repartidos entre actores públicos y privados. La primera, por tanto, acuña un concepto más genérico de red, abarcando más tipos de situaciones, pues lo aplicaría a todo tipo de relaciones entre actores públicos y privados. La segunda, por su parte, utiliza un concepto de red mas restringido que solo engloba una forma específica de interacción entre actores públicos y privados: aquella basada en una coordinación no jerárquica.
En la literatura sobre gobernabilidad, la mayoría de los autores lo emplean como concepto analítico para estudiar las relaciones estructurales, las dependencias mutuas y las dinámicas entre actores en la política (politics) y en la conformación de políticas públicas (policie). Aquí, el estudio a través de redes da una perspectiva desde la que analiza situaciones que no pueden explicarse como acciones pilotadas unilateralmente desde el centro tradicional del poder político y dirigido a la persecución de fines comunes. En este tipo de análisis, se determina qué intercambio de recursos se realiza entre los distintos actores y se analizan los resultados de dicha interacción, ello permite alcanzar explicaciones sobre el comportamiento de los actores. Otros autores (Renate Mayntz, Fritz Scharp[2]) entienden que no es suficiente comprender el comportamiento de un actor concreto y parten de la presunción implícita de que las estructuras sociales tienen más poder explicativo que los actores y sus recursos individuales.
En esta visión, las redes se conciben como conjunto de relaciones relativamente estables y en continuo funcionamiento, que movilizan recursos dispersos, todo ello con el fin de articular una acción colectiva que permita dar soluciones a problemas. Para explicar el concepto de redes y los resultados que producen se construye el concepto de actor-centred institutionalism que combina principios de rational choice con otros de institucionalismo. Esta visión expresa un cambio en las relaciones entre Estado y sociedad, pudiendo afirmarse que ya no existe una separación estricta entre los dos. En este contexto, las redes se presentan como solución para la coordinación de los problemas propios de las sociedades modernas. La construcción teórica es sofisticada y representa una porción menor en la literatura sobre redes (Navarro, 2002).
El objetivo de una red es el de mantener el flujo de información, y dada la heterogeneidad de los intereses y objetivos de los participantes, articularse con el fin de desencadenar hechos políticos y sociales de trascendencia local, regional, nacional o internacional. Es un medio para la participación comunitaria, que permite la identificación y definición de las necesidades de la población, los factores culturales y tecnológicos (invención, asimilación y adaptación) de las diferentes localidades y regiones. Son fuerzas sociales que emergen de las bases de la sociedad, cuyas relaciones específicas conforman vínculos con características, recursos, potencialidades y problemas propios (Yépez Tamayo, 1987; Camargo, 1999; Red Ara, 2000; FORJA, 2001; Banco Mundial, 2001; Molina 2001).
Una red se construye con la acción de cada organización en su contexto propio. Esta acción redundará en el conjunto, produciendo una transformación socio espacial. Se considera que la toma de conciencia acerca de la capacidad de organización influye en la apropiación de los procesos por parte de los individuos y la participación a su vez va construyendo conciencia (OIT, 1998).
La red social implica un proceso de construcción permanente, tanto individual como colectivo; es un sistema abierto que, mediante un intercambio dinámico entre sus integrantes y con integrantes de otros grupos sociales, permite convertir en actuales y colectivos los recursos potenciales que poseen los individuos y generar cambios en la estructuración socio-espacial en un territorio específico (op cit, 1998). Por tanto, los comienzos de una red no fructifican de un día para otro; se trata de movimientos más o menos organizados, de conversaciones y prácticas sociales, de momentos de encuentros y desencuentros. Son grupos humanos que crearán un campo de interés común.
Características de las redes de actores
Una característica importante de las redes es su permeabilidad. Las redes basadas en puntos de coincidencia heredados son menos permeables que las que se basan en rasgos comunes adquiridos. En algunos casos, las redes impermeables han sido señaladas y criticadas como impedimentos para el progreso económico (Olson, 1982). En otros casos, se ha observado y afirmado que el deterioro de las redes permeables es la causa de la decadencia de las tradiciones cívicas (Putnam, 1995).
La mayoría de las redes conectadas por capital social se mantienen a través del contacto personal y el aprendizaje experimental. A veces, las redes impersonales de capital social pueden mantenerse debido a la presencia de valores afectivos compartidos. Por ejemplo, algunas personas que pertenecen a organizaciones internacionales como iglesias, clubes de servicio, organizaciones políticas y asociaciones comerciales, se sienten conectadas entre sí aun que no se conozcan personalmente. Sus puntos de coincidencia y valores afectivos compartidos les proporcionan un capital social latente, que sólo requiere el contacto personal para activarse. La existencia de ese capital social latente es posible porque todos ellos saben que comparten valores afectivos respecto de determinados credos, conceptos y objetos.
Las redes resuelven el conflicto que existe entre quienes consideran que el capital social es un concepto micro, y quienes opinan que es un concepto macro. En un sentido, el capital social es un concepto micro porque es aportado por personas. Por otra parte, es un concepto macro porque reside en redes que pueden superponerse, y sirve para conectar a diferentes segmentos de la sociedad. También es un concepto macro en el sentido de que la afinidad es algo que se aprende culturalmente (se hereda), y no constituye el resultado de ningún esfuerzo individual consciente. Por último, una red puede ejercer influencias tanto micro como macro, pudiendo desalentar el comportamiento oportunista de uno de sus miembros, porque el costo de no hacerlo le acarrearía la repulsa de todos los demás miembros de la red. Es por ello que las redes pueden desempeñar una importante función en el mantenimiento de las reglas y normas aceptadas.
Estructura de las redes de actores
Las redes pueden tener muy diversas estructuras, entre ellas la jerárquica, la lineal y la difusa. Una organización puede tener una estructura formal de redes, pero el capital social puede conducir a la creación de redes de facto conectadas por ese capital social. A medida que aumentan las conexiones de capital social dentro de una red, el acceso de una persona a los recursos y la información también se incrementa. Sin embargo, cuando las conexiones que tiene una persona dentro de una red de capital social aumentan, también se eleva el costo de mantenimiento de esos contactos, especialmente si se mide en función del tiempo que se le dedica. Afortunadamente, la existencia de sistemas de comunicación rápidos y de bajo costo, como el correo electrónico y los teléfonos celulares, ha reducido considerablemente el costo financiero de mantenerse en contacto.
Cada estructura de red tiene consecuencias para la eficiencia económica y la generación de capital social (Burt, 1992). A continuación se mencionan algunas de las consecuencias de las redes en el paradigma del capital social:
Es más probable que quienes participan en redes ricas en capital social actúen sobre la base de los intereses compartidos entre los miembros de la red, que en beneficio de personas extrañas a ésta.
A medida que aumenta el capital social dentro de una red, también crece la productividad y se reducen las diferencias de ingresos entre sus miembros, aunque pueden ampliarse las diferencias en términos de productividad e ingresos entre los miembros de la red y quienes no son miembros de ella. Por esta razón, una de las causas de la pobreza puede estar relacionada con la exclusión de los pobres de las redes productivas.
Las redes pueden diferenciarse por su grado de permeabilidad. Las que se basan en puntos de coincidencia heredados son menos permeables que las derivadas de puntos de coincidencia adquiridos.
Cuando para ser miembro de una red se requiere características o puntos de coincidencia heredados, ello puede constituir un obstáculo para el desarrollo y la reducción de la pobreza.
Cuando para ser miembro de una red se requieren características adquiridas, ello facilita el desarrollo, ya que las redes pueden adaptarse a los cambios demográficos y las nuevas oportunidades.
Las asimetrías en las relaciones que forman parte de las redes crean obstáculos para el flujo de los recursos. Por ejemplo, si existe capital social entre las personas A y B, y entre A y C, pero existen relaciones hostiles entre B y C, la red será inestable y el flujo de recursos se verá restringido.
Funciones de las redes de actores
Méndez (1998) señala que las redes suelen aparecer por necesidades comunes, como superar la atomización, fortalecimiento, capacitación, asesoramiento, comunicación, coordinación y necesidad de trabajar en conjunto para aumentar el impacto. Generalmente no hay tiempo para realizar en forma individual los controles, las relaciones con el Estado, la capacitación de los recursos humanos, las evaluaciones y las mejoras legislativas; por ello, vale la pena reunirse con similares Las redes están siendo consideradas como una de las expresiones más recientes de las nuevas experiencias de desarrollo de articulación y coordinación. Identifica como las funciones tradicionales de las redes están vinculadas con:
Articulación y Coordinación: Se pueden concretar estas acciones mediante la gestión de actividades conjuntas entre las organizaciones como investigación, transferencia de recursos humanos, sistema de informática, servicios de administración, contabilidad, inversiones, relaciones públicas, prensa y comunicación, entre otros. Es posible realizar una oferta conjunta de servicios sociales, disminuir gastos en forma conjunta y hasta unir recursos financieros e invertirlos. Estas organizaciones son facilitadoras del intercambio Inter.-institucional e Inter.-regional, con mayor alcance, porque las acciones conjuntas trascienden los proyectos puntuales y logran mayores coberturas.
Fortalecimiento Institucional: La mejora institucional de las organizaciones integrantes tendrá más sentido sí se conocen sus debilidades y fortalezas, porque de esa forma se apuntará a reforzar concretamente allí donde hace falta. Mejorar la calidad de los servicios que prestan, fomentar el conocimiento sobre el sector, la temática o las organizaciones, profesionalizar a las organizaciones y sus servicios, trabajar por su fortalecimiento financiero, aumentar sus capacidades de negociación y concertación. Se trata de ofrecer asistencia cuando lo requieren las organizaciones integrantes, a los fines de obtener mejor rendimiento. Estas organizaciones deben preocuparse por implementar modelos de sistematización y medición del impacto de las acciones de las organizaciones integrantes.
Representatividad: También conocida como la actividad de lobby o cabildeo para todas aquellas gestiones en materia legal o fiscal, participación en redes externas y eventos nacionales e internacionales, presencia conjunta ante el gobierno, empresas privadas, medios de comunicación y Sociedad Civil; con el objetivo final de incidir en políticas o modificaciones, en beneficio de sus organizaciones integrantes. Se trata de organizarse, unificarse, contar con voces únicas, mejorar la comunicación con terceros e incrementar la capacidad de exigencia como interlocutor válido jurídicamente hablando. Se pueden concretar acciones participando en el diseño y evaluación de la política social, sugerir modificaciones para un marco legal más beneficioso, lograr puestos de representación en organizaciones públicas y mantener canales de comunicación y colaboración con el gobierno. En todo caso se trata de promover la defensa de los derechos de las organizaciones. Parra ello, es preciso situarse con una posición pro-positiva ante los planes del Gobierno y ante la Política Social en vigencia.
Movilización de Recursos y Beneficios: Entendida como una serie de modalidades que van desde la preparación y presentación de proyectos conjuntos a ser ejecutados por varias organizaciones, establecimiento de prioridades de proyectos financiables, negociación y compromisos con financistas, hasta la compra-venta o gestoría de descuentos de bienes y servicios que reduzcan costos operativos de las organizaciones miembros. Organizando bancos nacionales de información sobre agencias de cooperación, redes temáticas y regionales se facilitarían los trabajos conjuntos entre organizaciones.
Promoción y Comunicación: Resume todas aquellas actividades que faciliten la presencia pública, generen opiniones públicas favorables a los miembros y organización de eventos que reporten experiencias al país y al sector social. Promover la comunicación, impulsar vínculos de interacción y cooperación nacional e internacional, difundir experiencias y producir reflexión y pensamiento. Trasmitir la información necesaria para apoyar el trabajo de los miembros, presentar documentos públicos y generar opinión publica sobre aspectos en particular. Constituirse en foros de reflexión en temas comunes y velar por la mayor presencia, visibilidad y legitimidad del espacio de las organizaciones. Dar a conocer el trabajo de las organizaciones e intercambiar información cualitativa y cuantitativa del sector. Asumir y divulgar opinión y puntos de vistas sobre acontecimientos públicos.
Multiplicación de la Presencia y/o Participación en diferentes instancias: Las organizaciones cúpula y sus integrantes pueden estar representadas por cualquiera de sus miembros en cualquier instancia en que participen. Esto permite ampliar el espacio de participación entre diferentes frentes. Además los mecanismos de comunicación de las organizaciones cúpula permiten compartir la información rápidamente. Actualmente aparecen funciones con nuevas dimensiones de interés público desde las organizaciones cúpulas sociales, interesantes para el futuro próximo que serán identificadas.
Autorregulación, Control Normativo o Auditoría Social: Esta función se realiza sobre las organizaciones miembros para el seguimiento y evaluación de las organizaciones afiliadas o aquellas que desean pertenecer a la organización cúpula, lo cual asegura su legitimidad para ser interlocutor válido por las representadas, mediante el monitoreo permanente de sus programas y proyectos y de su administración. Control normativo es dar fe de la actuación de sus miembros, donde establecer normas y vigilar su cumplimiento, es una condición necesaria. Se pueden garantizar las funciones de representación, canalización de recursos y promoción, asegurando calidad de las organizaciones ante los contribuyentes, el Estado, los beneficiarios y ante la opinión pública. En estas instancias es más fácil compartir o crear principios éticos comunes, la definición de valores compartidos vinculados con los beneficiarios, la administración, presentación de cuentas, la relación con el Estado, con los financistas y con otras organizaciones del mismo sector es una tarea de autorregulación. Las organizaciones cúpula pueden proponer códigos de ética que se conviertan en referencias para el sector, pueden ejercer control social sobre las acciones de las organizaciones y transparencia de las cuentas. Tratándose de que las organizaciones no están obligadas a realizar auditoria de sus acciones, el exponerse a la regulación de su organización cúpula, se convertiría este accionar en un excelente factor auto-legitimante, y por otro lado, la organización cúpula se convierte en un instrumento de autorregulación del sector.
Veeduría Pública: Las organizaciones pueden proponer y vigilar la ejecución de una política de distribución de la riqueza. Pueden participar en un plan de seguimiento y monitoreo de la ejecución presupuestaria de los programas sociales del Estado. Pueden generar propuestas de reforma del sistema político y económico. Pueden generar información que precise las causas de la pobreza, pueden elaborar propuestas y metodologías innovadoras producto de la experiencia colectiva. Pueden apoyar la creación de servicios para los sectores excluidos. Se trata de "ver" por el colectivo una realidad de interés público, experiencia similar a la realizada en el ámbito sectorial por las organizaciones de promoción y defensa de los Derechos Humanos. Se trata de una nueva función que nos toca cumplir con valentía y exposición pública.
[1] Méndez (2002) señala que las redes son alianzas o lugares de encuentro de organizaciones. Formas institucionales y colectivas de organización. Puede denominarse de diferentes formas tales como asociaciones de organizaciones, cúpulas, coordinadoras, federaciones, centros nacionales, mesas coordinadoras, agencias de coordinación, organizaciones sombrilla, consorcios de ONG`s, encuentros o foros, unión, coalición, frente consejo, entre otras.
[2] En generales lo que se conoce como Escuela Max-Plank, representada fundamentalmente por los autores referidos y su desarrollo del concepto actor-centred institutionalism.
Comentarios