MORFOLOGIA Y TRAMA URBANA DEL CASCO CENTRAL DE PORLAMAR. ESTADO NUEVA ESPARTA. VENEZUELA: ENTRETEJER DE CALLES CON SIMBOLOS ICÓNICOS
El casco histórico
de Porlamar tiene una longitud este – oeste de 2000 m. por 1300 m. en sentido norte - sur,
aproximadamente, con un área 2.600 km. Integrado por un sistema viario y
parcelario que se rige por leyes y normativas establecidas por el gobierno
municipal y estadal en 1978, hoy día desactualizadas, en las cuales se
establecen los requisitos y procedimientos para la subdivisión de terrenos y la
creación de parcelas. Además, existen requisitos de zonificación que establecen
los usos permitidos en cada zona, lo que influye en configuración urbana
actual.
En cuanto a la planificación urbana se caracteriza por
una trama urbana diseñada siguiendo una morfología o patrón en cuadrícula o
damero en el Casco Central, conformado por manzanas principalmente cuadradas o
rectangulares estructuradas o delimitadas por una red de calles que se cruzan
en ángulos rectos. También, existe una morfología o estructura urbana de tipo
lineal que se extiende a lo largo de la costa, y que se organiza en torno a dos
avenidas principales, como la av. Santiago Mariño y la av. 4 de Mayo, las
cuales conectan las diferentes zonas de
la ciudad y con los municipios adyacentes.
Como resultado el manzaneo de Porlamar en el casco central está diseñado siguiendo una cuadrícula o damero, con manzanas principalmente cuadradas o rectangulares delimitadas por calles, con dimensiones por lado que van desde los 80 a 120 m., sumando un total aproximado de 112 manzanas.
En las Figuras siguiente se representa el crecimiento de la trama urbana del Casco Central de Porlamar , la cual permite interpretar los cambios en la morfología urbana:
a. Circunvalado por las líneas a trazo roja,
parece mostrarse la zona más antigua de la ciudad, destacada por manzanas cuadradas
de 100x100, y delimitada por la calle Velásquez al sur y la avenida Marcano al
norte.
b. Es interesante observar que los regidores de
ese tiempo trataron de mantener el damero colonial en un cuadriculado regular
de manzanas cuadradas. Es importante
señalar, que la ciudad está atravesada por el río “El Valle”, el cual creció hacia el este, conservando
esta propuesta, de manzanas cuadradas, a
pesar de la interrupción por el cauce
del mencionado río. Este intento de continuidad explicaría una
posible planificación de construir puentes para lograr la continuidad de
cada calle, hacia el este y el impedimento de hacerlo por lo costoso de esas
obras.
c.
En la
zona delimitada por las líneas rojas a trazo, posible segunda etapa del
crecimiento de la ciudad; llama la atención que los pasos construidos sean en
la calle Igualdad y Velázquez, que lograron extenderse de uno al otro confín
del mencionado urbanismo, explicable por ser las zonas más estrechas del cauce
y por ende el sitio donde las estructuras resultaron más económicas.
d.
Posiblemente,
en un principio, la ciudad estuvo delimitada entre el cementerio y el rio.
Luego de los puentes, el urbanismo creció hacia el este y se estableció una
segunda barrera que muestra un urbanismo de otras características: las manzanas
son más grandes y rectangulares. Sin embargo, el trazado original de la
cuadricula de 100x100, obliga a que esta expansión, mantenga la cuadra de norte
a sur, en su valor original, mientras se estira a la forma rectangular de este
a oeste, variando la manzana a 100x120 o más.
e.
De igual
manera, la ciudad creció hacia el sur, controlando la cuadra este–oeste en 100
m, mientras estiraba la norte –sur a 120
o más, tal como se aprecia en la zona delimitada por trazos amarillos,
con excepción de la zona bajo el cementerio que evoluciono a manzanas de
mayores dimensiones en ambas direcciones.
f.
El
crecimiento de Porlamar viene acompañado por el crecimiento de todo el estado y
del turismo; esto origina la necesidad de transporte hacia el interior, y desde
los aeropuertos y playas, que encuentra una barrera en la discontinuidad de las
calles, causadas por la topografía del rio y lo compacto de un urbanismo ya
establecido.
Quizás se pueda apreciar el esfuerzo de mejorar
esta movilidad, observando que uno de los primeros intentos para pasar sobre el
rio, en la zona de crecimiento hacia el este, fue una avenida que rompe la cuadricula y se desplaza en curva, buscando conectar el este de la ciudad
con la expansión hacia el oeste, (señalada en el plano con un segmento rojo que
busca la boca calle que va al oeste,
situada una cuadra abajo del cementerio). Ese intento, si existió, fue fallido,
posiblemente por la poca capacidad de esa calle o por el costo del terreno y el
puente.
Sin embargo, la idea de conexión entre el este y el oeste, y el flujo
vehicular externo que hay entre esas zonas, encuentra solución en el “par
vehicular” que constituyen las dos calles siguientes, Zamora y Maneiro,
situadas al sur del enlace fallido, que se complementan, en sentidos opuestos
para conectar el oeste con el este mediante la avenida Santiago Mariño y desde
allí; hacia el norte.
La estructura
urbana de Porlamar ha generado una ciudad compacta con alta densidad
edificatoria construida en una superficie relativamente pequeña. La ciudad se
ha expandido de manera vertical y cuenta con una amplia red de calles y
avenidas que conectan los diferentes barrios y zonas de la ciudad, que pueden
organizarse bajo un patrón de supermanzanas, que mejoren la compacidad y la
cohesión social.
El sistema
parcelario se basa en la subdivisión de terrenos en parcelas, que se utilizan
principalmente para la construcción de viviendas, comercios y otros usos. La
mayoría de las parcelas en el casco central son de pequeñas y medianas
dimensiones. En cuanto a la propiedad de las parcelas, la mayoría de ellas son
de propiedad privada, aunque también existen terrenos propiedad del municipio
que se destinan a proyectos de interés público.
La mayoría de las
parcelas cuentan con edificios de hasta 3 o 4 pisos de altura, que suelen ser
viviendas o locales comerciales con usos residencial y comercial. En las zonas
comerciales y de servicios, como el centro de la ciudad, se permiten edificaciones
de mayor altura, que pueden llegar hasta los diez o doce pisos. En las zonas
residenciales de baja densidad, como los barrios y las urbanizaciones, la
altura máxima permitida para las edificaciones suele ser de dos o tres pisos.
En el centro
histórico de la ciudad, se encuentran edificios coloniales y republicanos, con
patios interiores y balcones con vistas a las calles, que han sido restaurados
y adaptados para uso comercial y turístico, albergando tiendas, restaurantes,
hoteles, complejos de apartamentos y otros establecimientos.
Comentarios